CREU DE SANT JORDI

Estamos muy emocionados y agradecidos porque hoy hemos sabido que nos han otorgado la Cruz de Sant Jordi 2025, uno de los máximos reconocimientos que da la Generalitat de Catalunya.

Este premio es un reconocimiento la trayectoria de La Cubana, y por tanto en el trabajo, la pasión y el espíritu de juego de todas las personas que han pasado por esta casa y ha llevado su granito de arena a lo largo de estos 45 años. Desde actrices, actores, técnicos, sastrería, maquillaje, producción, administración, comunicación, amigos, familiares y colaboradores… TODOS.

También queremos dar las gracias al público, quien realmente nos ha empujado a seguir jugando a hacer teatro todo este tiempo. Este premio es tanto suyo como nuestro.

Este reconocimiento nos anima y espolea a seguir trabajando para llevar nuevos proyectos al teatro. ¡Nos vemos en los escenarios!!!

La Cubana recibe el galardón de ramblista de honor 2024 de manos de ‘Amics de La Rambla’

La Asociación Amics de La Rambla, que cada año entrega los galardones de Ramblista de Honor, nos ha querido otorgar este año el Galardón de Ramblista de Honor: “en reconocimiento a su trayectoria artística, a su relación y cariño por La Rambla y a su contribución a la felicidad y bienestar de las barcelonesas y los barceloneses”.

Los otros galardonados con esta distinción son Joan Oliveras Bagués y Cristina Caparrós. El acto de entrega se celebró este miércoles 23 de octubre en el Saló de Cent del Ayuntamiento de Barcelona, en un acto presidido por el alcalde de Barcelona, Sr. Jaume Collboni, y por el presidente de la Asociación Amics de la Rambla, Pau Bosch.

El fundador y director de La Cubana, Jordi Milán, agradeció en nombre de toda la compañía este reconocimiento y destacó la importancia de La Rambla para nuestra trayectoria, ya que, una vez dejamos Sitges, instalamos nuestra sede de operaciones muy cerca, en la calle del Carme.

La Cubana ha tenido y tiene una relación muy intensa con La Rambla y le tenemos mucho cariño: allí actuamos por primera vez en una sala, en el Teatro Romea, con La Tempestad (1986); el Capitol se convirtió en teatro cuando hicimos temporada con Cómeme el coco, negro (1990), y produjimos y ensayamos Cegada de Amor en locales comerciales de la calle del Carme y la calle de la Junta de Comercio. La Rambla también ha sido escenario de muchas de nuestras acciones de calle, celebraciones y ruedas de prensa.